El consejero delegado y cofundador de Nvidia, Jensen Huang, ha sido reconocido como la figura más influyente de 2025, consolidando la tendencia de destacar a los líderes de la inteligencia artificial (IA) como los principales transformadores globales.
Huang recibió la distinción de “Persona del Año 2025” por el Financial Times, y fue simultáneamente honrado por la revista TIME, que lo incluyó en su portada junto a otros referentes como parte de los “Arquitectos de la IA”. Ambos medios internacionales coinciden en señalar el papel fundamental de Huang en la “fiebre de la IA” que domina los ámbitos empresarial y financiero.
El reconocimiento a Huang se produce en el momento de mayor auge de su compañía. Nvidia, bajo su liderazgo ininterrumpido desde 1993, se ha catapultado hasta convertirse en la empresa cotizada más valiosa del mundo, superando la barrera de los 4 billones de dólares (o 4,4 billones de dólares tras un pico de 5 billones).
El valor de la compañía radica en sus chips de IA ultrapotentes, los cuales son el hardware de referencia indispensable para entrenar sistemas de inteligencia artificial avanzada, como ChatGPT y los generadores de imágenes, y son utilizados por gigantes tecnológicos como Google, Microsoft y OpenAI. El Financial Times subraya que la demanda de estos chips sostiene uno de los mayores impulsos históricos de inversión para construir infraestructura tecnológica a nivel mundial.
Liderazgo Sostenido y Estrategia Global
Nacido en Taiwán y educado en Estados Unidos, Huang, de 62 años, cofundó Nvidia en 1993 con el objetivo inicial de revolucionar los gráficos de ordenador para videojuegos. El éxito de la compañía se atribuye a su longevidad directiva de más de tres décadas y a su visión estratégica, que anticipó cómo los diseños tradicionales de chips serían superados, dando a los procesadores gráficos de Nvidia una ventaja decisiva en la era de la IA.
Además de su perspicacia tecnológica, los reportes destacan la destreza de Huang para la negociación internacional. Ha cerrado acuerdos estratégicos con gobiernos (como la venta de chips a Arabia Saudí) y ha navegado complejas interacciones con administraciones estadounidenses, demostrando una habilidad única para liderar programas de inversión a gran escala que han redefinido el sector.
En conclusión, la elección de Jensen Huang como Persona del Año lo sitúa en la línea de los líderes tecnológicos que han marcado época, consolidándolo como el principal artífice de una era donde la inteligencia artificial se ha convertido en la fuerza tecnológica que define el presente y el futuro económico global.
