De acuerdo al Informe de Cuentas Nacionales publicado El Banco Central, la actividad económica del país se expandió un 3,1% en el segundo trimestre de 2025. El resultado superó tanto al dato preliminar del Imacec como a la proyección de los analistas, que apuntaban a un 2,9%.
El organismo emisor también revisó al alza el crecimiento del primer trimestre, desde un 2,3% a un 2,5%, lo que consolida una trayectoria de mayor dinamismo económico en comparación con la primera mitad del año pasado.
El crecimiento estuvo explicado principalmente por el aumento en servicios personales, minería e industria manufacturera, mientras que el comercio se redujo en el margen, restando parte del impulso global.
En términos desestacionalizados, el PIB mostró un por crecimiento de 0,4% frente al trimestre anterior.
El consumo de los hogares aumentó 3,1%, liderado por el gasto en bienes no durables, como vestuario, alimentos y productos farmacéuticos. El consumo de servicios también mostró un comportamiento positivo, influenciado por mayores erogaciones en salud, restaurantes, hoteles y transporte.
Las exportaciones de bienes y servicios crecieron 5,4%, mientras que las importaciones registraron un alza más pronunciada de 14,6%, generando un efecto neto negativo en el PIB.
El incremento en las importaciones fue impulsado principalmente por bienes como maquinaria industrial y equipos de transporte, mientras que, en servicios, el mayor dinamismo provino de los servicios empresariales.
El Banco Central señaló que “el aumento del consumo de bienes durables fue liderado por las compras de productos tecnológicos, en particular de teléfonos móviles”.


